Tesoros del Mudéjar escondidos en la Iglesia de Santiago
La Torre y la Puerta Mudéjar de la Iglesia de Santiago en la Calle Granada son dos tesoros escondidos de la ciudad de Málaga
Situada en calle Granada está la Iglesia de Santiago, la primera Iglesia que se construyó en Málaga tras la llegada a la ciudad de los Reyes Católicos.
Torre Mudéjar
La Torre Mudéjar o Alminar Árabe, fue levantada hacia el siglo XVI. Consta la torre de cuatro cuerpos, el primero de los cuales está exento de todo adorno y que, flanqueado de anchas pilastras, enlazan con una cornisa escasamente volada. Tiene en su frente exterior, y alineada con la misma fachada, una ventana para ventilación e iluminación interior, constituyendo su único hueco y adorno. Caso contrario es el segundo cuerpo, que manifiesta en tres de sus cuatro frentes, sobre rectángulos rehundidos, delicada labor de rombos hechos con ladrillos seccionados. Los mismos arrancan de seis columnillas rematadas por capiteles del mismo material. Todo el tejido del adorno geométrico esta flanqueado por delicadas pilastras que rematan también en filigranas de terracota. En la parte inferior del mismo existe un pequeño hueco de ventilación interior, labrado a base de ladrillo seccionado, que no interfiere la disposición del tejido romboidal ascendente. El tercer cuerpo está separado de su inmediato anterior por una cornisa que, pese a su escasa voladura, permite la contemplación de 12 elementos por cada lado de sugerente filigrana de forma piramidal. El rectángulo rehundido es más pequeño que el anterior y carece de decoración, pero esa ausencia de adorno se complementa con un doble tondo de bordes de ladrillos, en el interior del cual se haya otro pequeño hueco estrecho y vertical para su ventilación. Más corto que el inmediato inferior, este cuerpo remata en una imposta sogueada que igualmente se realizó en barro cocido. El cuarto y último cuerpo ejerce función de espadaña, dado que sus cuatro caras abren otros tantos huecos en arcos de medio punto donde se sustentan las campanas. Su cubierta está lograda mediante una cúpula semiesférica que está adornada de azulejos vidriados y bolas de cerámica en colores verdes y amarillo miel, genuinos en la tradición alfarera hispanomusulmana, y remata en un cuerpo bulboso igualmente de cerámica, sobre la que gira una veleta. Hay que detenerse amorosamente en cada uno de sus elementos, seguro que hallaremos nuevos motivos para apreciar su arcaica belleza, su perfecta disposición, la armonía de su estructura y sobre todo y especialmente la delicadeza con que fue labrada.
Puerta Mudéjar
Era la puerta principal de la Iglesia hoy cegada, es de estilo Mudéjar. Es de ladrillo aplantillado, se abre con arco apuntado con arquivolta conopial enmarcada por alfiz que desciende hasta el suelo. Las enjutas se decoran con alicatado de dibujo geométrico que forma lazos de ocho y diez puntas en blanco, rojo, azul y verde, semejantes a los de la Torre de las Infantas de la Alhambra o la Capilla Real de la mezquita de Córdoba. Si se fijan bien en la parte superior izquierda hay una estrella de diez puntas, y en la parte derecha de ocho puntas. En la parte superior hay colocado un medallón con las insignias del Apóstol Santiago.
Según nos dice Rosario Camacho en el siglo XVIII esta iglesia recibió una amplia reforma que afectó a la realización de una nueva sacristía, quedando la primera como capilla colateral, la capilla del Pilar; y nuevas puertas de acceso a las naves laterales, cegamiento de la portada principal para eliminar el coro del centro de la nave central, para situarlo elevado sobre ella misma, apoyado en el muro del hastial, y el dorado del retablo. Además se rebajó el suelo, se cubrió la armadura con una falsa bóveda de yeso y cañas con adornos barrocos, y se hizo nueva, también la bóveda del presbiterio.
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